Cómo habituar a tu animal a utilizar un transportín

Debemos colocar la jaula en un sitio donde podamos estar bastante tiempo.

En un principio dejaremos la jaula abierta para que sea él, si quiere, el que entre a tumbarse. Para favorecer eso pondremos un lugar mullido dentro (su cama, una manta…) y retiraremos las otras opciones de tumbarse en algo mullido (será más fácil en caso del perro). Le daremos algo para morder (en caso del perro, es posible que prefiera morderlo allí refugiado). A un gato puede gustarle más si colocamos el transportín en alto en un sitio estable.

Para favorecer que entre por su propio pie hay algunas cosas con las que podemos ayudar. Cerrar el transportín y deja unos premios dentro, al abrir la puerta entrará con más ganas. Por otro lado a lo largo del día tira unos cuantos premios dentro para que vaya entrando a cogerlos.

Ata algún juguete interactivo/hueso, de modo que para morderlo tenga que permanecer dentro.

Ponle su plato de comida al final del transportín/jaula.

Enseñarle a entrar y salir.

Mientras esté entretenido con el hueso…empezaremos a cerrarlo unos minutos y abrirle antes de que quiera salir él. Si en algún momento quiere salir se le ignora. Esperaremos a que se calle /calme un instante, para abrirle. Una vez tolere quedarse cerrado aumentaremos ese tiempo progresivamente (introduciendo en medio periodos más cortos).

Cuando tolere el paso anterior, a ratos saldremos de la habitación y volveremos pronto (también aquí aumentaremos los tiempos de quedarse solo introduciendo periodos más pequeños). En este punto, si hay más de una persona en casa, puede una marcharse y la otra permanecer en la habitación, dándole seguridad, a la vez que va tolerando que una persona abandona la habitación.